El desengaño es uno de los sentimientos que más desgaste emocional provoca.
Mi imagen mental de este sentimiento tan profundo es como estar admirando felizmente un paisaje impresionante desde la cima de una montaña y, de pronto, te encuentras cayendo por el precipicio a gran velocidad, sin saber qué ha pasado.
¿Quién no se ha sentido desengañado por un amigo o por una pareja o por un familiar, que en un momento determinado han actuado como tú no esperabas ?….hay que darse cuenta que una premisa básica para que te sientas desengañado es que previamente la persona que lo causa está muy cerca del corazón, si no es así, no cabe desengaño
Bajo mi punto de vista, el desengaño tiene un parentesco cercano con la tristeza, y por tanto, con el duelo, ya que durante un tiempo te va a condicionar en algún grado la vida, pero debemos tener claro que el desengañado no es el problema, su único problema es haber confiado en esa persona de una manera que el otro no puede estar a la altura. En otras palabras, el desengaño nace de una sobreestimación del otro y por tanto, la visión que se tenía de esa persona no pertenece a la realidad, así que no debe merecer tanto la pena.
Eso sí, hay que transitar por el dolor durante un tiempo y poco a poco ir asimilando que lo que hemos perdido no es tanto a la persona como a la valía que nosotros le habíamos adjudicado sin merecerlo.
Y como última recomendación, mira a tu alrededor, seguro que hay muchas personas que realmente merecen la pena, céntrate en ellas y no las pierdas de vista.